viernes, 25 de febrero de 2011

El Museo de Marionetas de Palermo y los pupis de Enzo Mancuso

(cabeza de pupi del Museo delle Marionette)

Hablar del Museo Internazionale delle Marionette Antonio Pasqualino de Palermo es hablar de uno de los más importantes museos europeos de marionetas. Lo es por su fondo extraordinario de pupis sicialianos y napolitanos, por sus ricas colecciones de títeres, sombras y marionetas de otras partes del mundo, y sobretodo por los estudios que acompañan el fondo de los pupis, tanto en la documentación conservada como en las publicaciones hechas por el mismo museo.

Es decir, objetos conservados pero provistos de toda la información que los acompaña, los explica y los sitúa en el tiempo, el espacio y en el imaginario de la isla. Esta suma de valores se debe a una labor que ha persistido en el tiempo desde los años sesenta y setenta a cargo del doctor Antonio Pasqualino quién, junto con su esposa Janne Vibaek, recogieron y tomaron nota de lo que aún se conservaba del teatro de pupis. Una tradición que entonces se encontraba en una aguda fase terminal. Antonio Pasqualino, en conjunción con las familias de puparos que persistieron en la tradición, son los artífices de que esta antigua forma de teatro se haya mantenido y que aún hoy sea posible ver representaciones de pupis en Palermo con programaciones regulares.

Existen en Palermo al menos cinco teatros en activo, tal como pude constatar en mi visita: el Teatro Carlo Magno de Enzo Mancuso, el teatro Figli d'Arte Cuticchio de Mimo Cuticchio en el que también trabaja su hijo Giacomo y parte de su familia, el Teatro dei Pupi "Ippogrifo" de Nino Cuticchio (situado dónde se encontraba el de su padre, en Vicolo Ragusi nº 6), el Teatro I Paladini, un curioso y sugestido lugar situado muy cerca de la iglesia Santa Agata Alla Guilla, dónde se acumulan típicos carros pintados a la manera siciliana y que no pude visitar por falta de tiempo, y el teatro del Museo delle Marionette ya citado, a cargo de Enzo Mancuso. Es posible que aún existan otros en la ciudad, pero éstos son los que yo puedo testimoniar.

(guapos)

La colección de pupis del Museo es francamente extraordinaria. El fondo cuenta con más de cuatro mil marionetas, la mayoría guardadas en un almacén , pues no hay espacio suficiente para mostrarlas todas. Las que están expuestas proceden de Palermo, de Catania y de Nápoles. Además de los caballeros y paladines, todos con sus preciosas armaduras -las hay de todos los tipos, algunas de formas exhuberantes y fantasiosas-, hay también personajes digamos "civiles", y otros mágicos y legendarios. Muy interesantes son también los "guapos", personajes de la Camorra protagonistas de algunas historias de la Opera dei Pupi napolitana.

En el video adjunto pueden verse algunas de las marionetas expuestas así como un fragmento de la actuación vista el viernes 18 de febrero en el Museo delle Marionette. Quiero agradecer aquí la amabilidad de Enzo Mancuso, quién me permitió filmar desde dentro del retablo.

miércoles, 23 de febrero de 2011

Los pupi de la familia Cuticchio

(la pupara Tania arreglando un pupi tras la batalla final. Teatro de Mimo Cuticchio)

Tras las funciones en el Museo Internazionale delle Marionette di Palermo, he podido recorrer un poco la ciudad y hablar también con algunos pupazzi (los que representan los espectáculos de Opera dei Pupi). Ya en el museo tuve la suerte de ver una representación entera a cargo de Enzo Mancuso, de una extraordinaria calidad, tanto en la dicción como en la interpretación de la marionetas, dotadas de un ritmo frenético y una perfecta sincronía en las batallas. Mancuso tiene su propio teatro llamado Teatro Carlo Magno en Via Collegio di Maria al Borgo Vecchio.

Anteayer vi un episodio de la historia de Orlando y su primo Rinaldo, ambos pretendientes de la bella Angelica, a cargo de la compañía de Mimo Cuticchio con su hijo Giacomo como primer pupazzi, en su recoleto teatro de la Via Bara all'Olivella. También tuve la ocasión ayer de ver el final del episodio de la muerte de Orlando, uno de los más dramáticos y poco representados, pues no es grato ver como muere el héroe de la saga. Así me lo explicaba un compungido Giacomo Cuticchio, joven músico y pupazzi, aún con la camiseta sudada y casi con lágrimas en los ojos, tal era la identificación con el personaje que exige actuar con los pupi.

(pupis históricos de la familia Cuticchio)

Por la tarde he pasado por el teatro y taller que tiene Nino Cuticchio en el Vicolo Ragusi nº 6, también conocido como Teatro dei Pupi "Ippogrifo", muy cerca de los conocidos quattro canti de la ciudad, un local que fue también el teatro del padre de los Cuticchio. Charlar con Nino ha sido entrar en contacto con las raíces más profundas de la tradición de los pupi: tras aprender el oficio ya de muy pequeño con el maestro puparo Francesco Sclafani, Nino es y ha sido, además de intérprete manipulador en activo, el gran artista escultor de la familia: suyos son muchos de los pupi que utiliza la compañía, así como de algunas joyas que pude ver en la sala de exposición que tiene Mimo Cuticchio en la Via Bara (como la cabeza del padre Cuticchio rodeada por las cabezas de sus seis hijos).

(Nino Cuticchio en su Teatro dei Pupi "Ippogrifo" del Vicolo Ragusi, 6)

Para completar esta entrada sobre la familia Cuticchio, me falta mencionar a Ana Cuticchio, hermana de los aludidos Nino y Mimo, quién estuvo actuando en el Teatro Malic dos veces en los años ochenta. Recuerdo la energía de Ana, que vino en ambas ocasiones con un equipo de puparis de primerísima calidad (creo que estaba el señor Canino, uno de los más reconocidos intérpretes de pupi) y que hizo retumbar las paredes del teatro como pocas veces recuerdo haber visto. El público salió traspuesto y deslumbrado, tal fue el derroche de energía que salió de la boca del retablo de las marionetas.

Adjunto algunas fotos tomadas en ambos teatros de la familia Cuticchio.

domingo, 20 de febrero de 2011

Actuación en Palermo y los Pupi

(Sirena. Pupi del Museo Internazionalle della Marioneta di Palermo)

Me encuentro en Palermo siguiendo estas Rutas de Polichinela que me llevan por las ciudades titiriteras de Europa más significativas. Ya sabrá el iniciado que hablar de Palermo y de Sicília es hablar de la Opera dei Pupi, nombre con el que se conoce una tradición local de vistosas marionetas que representan el riquísimo repertorio carolingio, con Orlando como figura principal, más un sinfín de caballeros y paladines afines o enemigos de nuestro héroe, con los que entabla singular batalla. Historias de moros y cristianos en las que se entremezclan leyendas populares, mitos antiguos y vistosas figuras sobrenaturales.

(frontispicio del teatro de la Opera dei Pupi, Museo Internazionalle delle Marionette di Palermo)

Una manera de iniciarse a fondo en esta tradición es acudir al Museo Internazionalle delle Marionette Antonio Pasqualino, dónde el visitante encontrará un fondo extraordinario de marionetas, muchas de ellas del siglo XIX, de tallas extraordinarias, más decorados, carteles, figuras sobrenaturales (ángeles, sirenas, dragones, serpientes voladoras…), libros, revistas, etc . Además, dos veces a la semana, los martes y viernes, hay función de pupi a cargo de la compañía de Enzo Mancuso en el maravilloso salón noble del palacio dónde se unica el Museo, rodeado de decorados y sirenas volantes.

(montando el espectáculo)

He tenido la suerte estos días de actuar con mi espectáculo “A Manos Llenas invitado por el Museo y su Festival di Morgana, con la inestimable colaboración del Instituto Cervantes de Palermo y del Instituto Ramón Llull. Montar en la misma sala dónde se encuentra el teatro de los pupi, rodeado como estaba por un sinfín de títeres históricos de muy distintas procedencias y tradiciones, ha sido una experiencia inolvidable y muy reconfortante desde el punto de vista titiritero. La función ayer fue además muy bien recibida por el público, que acudió llenando el aforo de la sala, y hoy domingo se realiza la segunda.

(Rebecca Simpson en su puesto de combate)

Hablaré más adelante del Museo, de sus actividades y colecciones. También haré referencia de los distintos “pupazzi” (titiriteros que representan los pupi) que conozco en Palermo, como los dos hermanos Mimo y Nino Cuticchio, y el ya citado Enzo Mancuso. Igualmente de los pupis de Catania, que se distinguen por su mayor tamaño.

Cuelgo de momento algunas imágenes realizadas por Rebecca Simpson, quién me acompaña en esta aventura siciliana, que darán una cierta idea al lector de lo que estoy hablando.

(el público antes de empezar la función)

miércoles, 16 de febrero de 2011

Premio de la Crítica de Portugal al festival Fimfa y a Joao Paulo Cardoso

Feliz noticia para los marionetistas portugueses e ibéricos en general: la Asociación Portuguesa de Críticos de Teatro ha dado el Premio de la Crítica 2010 al Festival FIMFA (Festival Internacional de Marionetas y de Formas Animadas de Lisboa) y al titiritero Joao Paulo Cardoso, de Porto, fallecido a finales del 2010.

Como dice el comunicado de los críticos portugueses:

O júri foi constituído por Alexandra Moreira da Silva, João Carneiro, Maria Helena Serôdio e Rui Pina Coelho.

PRÉMIO DA CRÍTICA atribuído ao FIMFA e a João Paulo Seara Cardoso

Ao FIMFA - Festival Internacional de Marionetas de Lisboa - por dez anos de trabalho perseverante e continuado na apresentação, em Portugal, do que de mais interessante e importante existe no Teatro de Marionetas, Objectos e Formas Animadas. E a João Paulo Seara Cardoso, sem o qual o Teatro de Marionetas em Portugal não existiria na sua forma, dimensão e qualidade actuais.

Felicidades pues a Rute Ribeiro y a Luís Vieira, de la compañía A Tarumba, así como a la familia y a los compañeros de Joao Paulo Cardoso. Creo que el premio está más que merecido para ambos premiados.

El Fimfa se ha convertido en un referente europeo al destacar por la altísima calidad de su programación, sin demasiadas concesiones a la galería, provisto de un público fiel y abudante, abierto además a todos los géneros y épocas, desde las vanguardias más arriesgadas hasta lo más interesante de la tradición. El interesado puede consultar las dos crónicas que publiqué del último Festival en mayo 2010 clicando en crónica 1 y crónica 2.

Cardoso, por su parte, ha destacado por ser uno de los ejes del titiritismo portugués de los últimos treinta años. Su compañía Marionetas de Porto ha sido una de las más prolíferas y creativas del país. Esperemos que tanto la compañía como su proyecto de un Museo de Marionetas do Porto sigan adelante, perseverando en los mismos objetivos que Cardoso tuvo en vida. Quién quiera saber más sobre el personaje en este blog, clicar aquí.

lunes, 14 de febrero de 2011

Explosión de libertad en Egipto

Ya en varias ocasiones se ha dicho en estas Rutas de Polichinela que el significado principal y arquetípico de los títeres de la familia de Pulcinella es el principio de vitalidad, por el que nuestro personaje no se deja encorsetar y rompe con los moldes, las inercias y las convenciones que lo intentan atar. Así es Pulcinella, Punch, Kasperl, Petrushka, Karakoz, Mobarac y Aragosi. Éste último es el nombre que toma nuestro personaje en Egipto.

Pues bien, puede decirse que estos últimos días hemos sido testigos de una exaltación simbólica del personaje encarnado en el pueblo egipcio, que de pronto y porrazo se ha sacado de encima el miedo y una dictadura de treinta años.

Ha sido emocionante seguir hora a hora y minuto a minuto, la lucha llevada a cabo por la juventud sublevada en la Plaza de Tahir a la que se le ha ido sumando el grueso de la sociedad egipcia en números que sobrepasaban los millones. Una reacción insólita que muestra la madurez y la riqueza de este pueblo milenario, capaz de enfrentarse a los ataques de una policía prepotente y retorcida, y sin dejarse manipular ni amedrentar por el dictador y sus intentos desesperados de atajar la revuelta. Al final Mubarak tuvo que irse y aunque las cosas siguen confusas en el país, un cambio de tracendental importancia ha tenido lugar ante los ojos atónitos y desconcertados de medio mundo.

Europa, especialmente, se lo mira incrédula, aún sin acabar de tragarse lo que ha sucedido ante sus narices en apenas un par de semanas. Curiosos vientos de cambio y de emergencias vitalistas soplan por el Mediterráneo. Un vitalismo inteligente y bravo, altamente civilizado y muy creativo. Sin duda viejos y poderosos arquetipos redefinidos por la Modernidad se acaban de manifestar mostrando al mundo los nuevos rostros de épocas futuras. Un alivio para los pesimistas y una carga de revitalización para los que ya pensaban que la historia era una pesadilla sin remedio alguno. Las ciudades de Europa deberán mirarse en el espejo de esta macrociudad que es El Cairo, casi un país entero, que sin embargo ha mostrado una coherencia interna sin parangón alguno.

Los analistas hablan de las próximas revueltas del mundo árabe, pero en realidad son muchos más los países que deberían poner sus barbas a remojar y empezar a preocuparse. China prohibe la palabra Egipto en las redes de Internet (sintomático); Irán repite lo de Mubarak hace dos semanas: limitar Internet y frenar los flujos de redes y móviles; Berlusconi ve como las mujeres salen a la calle para reirse de sus chabacanerías… Creo que los vientos levantados en Túnez y Egipto son mucho más importantes de lo que pensamos.

Aragosi, esta almita antigua y rebelde de los barrios de El Cairo, y con él todos sus primos de la familia de Polichinela, está contento. Como todos los principios de vida anclados en lo popular, se rejuvenecen cuando los pueblos se levantan y se proclaman libres. Los titiriteros, humildes sombras a su servicio, sonreímos al ver la euforia de nuestras audaces y sorprendentes criaturas.