jueves, 6 de enero de 2011

Londres y los caballos marionetas de War Horse

(imagen de WarHorse)

Los tiempos cambian y del pobre Punch, pocos se acuerdan hoy en Londres. Digo pobre aunque todos sabemos que es un truhán de mucho cuidado, un canalla como pocos los hay. Pero también es verdad que dejó de serlo hace años, superado por maldades que convierten sus viejas fechorías en un simple juego de niños. O simplemente obligado a trabajar para los niños y para las escuelas, rebajando sus grados de malignidad, aunque algunos Professors mantienen la costumbre de plantar sus retablos en las playas en verano, dónde hay más libertad para soltar la lengua y acudir a los clásicos e inocentes atropellos…
En el hotel dónde me hospedo, no lejos de Victoria Station, me pregunta el hotelero a qué me dedico.
- Puppeter, contesto.
- ¿what?... –pregunta casi sin comprender. Tras insistir, responde:- pensaba que ya no se hacía eso. ¿Todavía hay gente que va a verlo?...
Cuando le hablo de Punch, dice como quién arranca del pasado oscuros recuerdos:
- Oh, ye, mam and dad use to put us in front of the Punch and Judy shows at the seaside at Brighton, …all the free stuf…
Respuesta maravillosa que ilustra el Londres actual, muy alejado de la ciudad que vio Dickens y en la que Punch reinaba como unos de sus personajes callejeros más populares. Tanto lo era, que con su nombre se titulaban revistas, pubs, juegos, o se le utilizaba como personaje satírico capaz de decir en voz alta lo que nadie osaba.
Pero es el mismo hotelero quién, al saber que me dedico al teatro, me aconseja encarecidamente la obra que se representa desde hace un año en el New London Theatre: WarHorse.
- That’s a real puppet show!!!
Me veo pues obligado a hacer la cola para los retornos en el New London Theatre –lleva un año en cartelera y está todo vendido hasta el mes de abril– y tenemos la suerte de conseguir unas buenas entradas a un precio bastante caro. Pero ha valido la pena.
WarHorse (producción del National Theatre en colaboración con la Handspring Puppet Company) es un musical basado en la novela de Michael Morpurgo, con dirección de Marianne Elliott y Tom Morris, y música de Adrian Sutton, en el que el protagonista es un caballo, una marioneta de tamaño real manipulada por tres manipuladores que se ponen literalmente dentro del caballo, y que consiguen un realismo y una calidad de movimientos extraordinaria. Los actores –seguramente una treintena entre cantantes, protagonistas y figurantes del coro– aparecen como personajes secundarios frente al relieve y la dignidad alcanzada por los caballos que surgen en escena. Y de eso trata la obra: poner en relación la dignidad animal del caballo con la deshumanización que produce la guerra. Dignidad que no es más que la proyección que los humanos hacemos en estos animales nobles y libres, y que son capaces de juntar las sensibilidades de los aparentemente enfrentados por la guerra. Es emocionante ver como el caballo consigue humanizar a civiles y militares en situaciones extremas, restituyéndoles la dignidad arrebatada por la barbarie bélica.
He aquí el triunfo de la marioneta en la cartelera londinense, bien alejada de los Punch y de los muppets y demás formas habituales del género. WarHorse es una obra para todos los públicos, seguramente visitada por grupos de escolares y por familias enteras.
¿Significa eso que se acabó la vieja escuela de los titiriteros solistas? En absoluto, pero sí es un indicativo de que los tiempos cambian y de que el teatro de marionetas, lejos de estar desapareciendo como algunos podrían pensar, se instala imperceptiblemente en el centro del pensamiento escénico contemporáneo. Pues es evidente que jamás nadie conseguiría similares efectos con caballo de verdad, o al menos con tamaña eficacia.
Lo bueno del teatro de marionetas es la amplia gama de formas posibles que ofrece y permite. Desde el Punch al WarHorse, pasando por tantos y tantos trabajos que los titiriteros realizan en uno u otro estilo.
Hoy veré a Geoff Felix, conocido Punch and Judy Professor y especialista en historia del personaje. Seguro que, como ayer con Penny Francis, me revelará cosas de las que jamás hubiera sospechado.

1 comentario:

  1. Hola Tony, espero que estés muy bien. Te quiero pedir recomendación para hospedaje en Londres pues estaré por allá en febrero del 2013. También quisiera ver War horse. Crees que necesito comprar los bolentos desde antes? Un abrazo y Felicidades por los nuevos proyectos de difusión del Arte de los títeres. Miguel Angel de Luna Morena desde Guadalajara México...

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